La garantía de una finalización perfecta explicada por Alobees

La garantía de una finalización perfecta protege al propietario del proyecto contra cualquier defecto identificado dentro de un año después de la entrega de un sitio de construcción. Las empresas deben reparar con prontitud todos los trastornos notificados que afecten a sus estructuras.

¿Qué es la garantía de finalización perfecta?

La garantía de una terminación perfecta se rige por el párrafo 2 del artículo 1792-6 del Código Civil. Exige que el contratista corrija cualquier defecto que encuentre el propietario del proyecto dentro del año siguiente a la entrega de obras.

Estos defectos pueden notificarse en el momento de la recepción, mediante las reservas registradas en el informe, o notificarse por escrito después de la recepción, por carta certificada con acuse de recibo.

¿Cuál es la fecha límite para la subrogación?

El período de garantía de finalización perfecta se extiende a un año a partir de la fecha de Aceptación del trabajo. Por lo tanto, es esencial que esta fecha se establezca claramente entre el propietario y el contratista para marcar el inicio y el final de la garantía.

Los defectos deben ser identificados durante este año, incluso si las reparaciones se pueden llevar a cabo más adelante.

¿Qué cubre la subrogación?

La garantía de una finalización perfecta cubre todas las obras. Exige que las empresas rectifiquen cualquier defecto, independientemente de su tipo o gravedad. Por lo tanto, deben asegurarse de que cada elemento, desde la obra estructural hasta los acabados y el equipo, cumpla con las especificaciones contractuales.

Evidentemente, esta garantía cubre todos los defectos que comprometan la conformidad de la construcción con el contrato.

¿Qué se excluye de la garantía de finalización perfecta?

Es importante tener en cuenta dos excepciones a la garantía de finalización perfecta:

• No cubre los daños causados por el desgaste normal, el uso diario o el mantenimiento inadecuado de la estructura.
• Esta garantía no cubre los trastornos aparentes que no hayan sido notificados por las reservas cuando se recibió la obra.

¿Cómo se implementa la subrogación?

La implementación de la garantía de finalización perfecta comienza con la inspección final del proyecto. Si revela reservas, hay dos escenarios posibles: se puede aceptar la recepción registrándolas en el Informe de aceptación, o suspendidos, si se consideran demasiado importantes. La empresa debe entonces hacer las reparaciones necesarias. En caso de incumplimiento de este requisito tras una notificación formal, el cliente tiene derecho a utilizar a otro profesional para que lleve a cabo el trabajo.

Si se descubren defectos después de la inspección, el cliente debe notificarlo oficialmente a la empresa por correo certificado, solicitando una pronta corrección de conformidad con los acuerdos contractuales. Con la garantía de una finalización perfecta, la empresa está obligada a actuar de acuerdo con esta solicitud. Si no cumple con los plazos establecidos y no responde a la notificación formal que debe seguir, el propietario del proyecto también puede recurrir a otro profesional. a costa y riesgo de la empresa en quiebra.

Como empresario, ¿cuáles son sus obligaciones tras la activación de un GPA?

Estos son algunos consejos para gestionar sus responsabilidades de forma eficaz de cara a utilizar la garantía de finalización perfecta:

• Repara rápida y bien: priorice las estructuras en función de su urgencia e impacto, respetando al mismo tiempo los estándares de calidad para evitar futuras reclamaciones.
• Cumpla con los plazos: sea realista en su cronograma de reparaciones. Informe inmediatamente en caso de retraso y ajuste su cronograma.
• Comunícate con claridad: manténgase en contacto con el propietario del proyecto. Actualízate sobre el progreso y mantente atento a cualquier pregunta o inquietud.

Si los problemas persisten:

• Considere la mediación: antes de pensar en el tribunal, la mediación puede resolver el conflicto de forma amistosa y gratuita.
• El tribunal como último recurso: si es necesario, el asunto puede remitirse al tribunal, pero cualquier acción debe iniciarse en el plazo de un año a partir de la recepción de la obra.

Gestionar la subrogación con seriedad puede evitar muchos inconvenientes. Un enfoque proactivo y una buena comunicación suelen ser la clave para evitar disputas.

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Estas son algunas características que pueden facilitar la gestión de la subrogación:

• Organización de tareas: garantizar un seguimiento preciso del progreso del trabajo en el sitio para optimizar la gestión de los recursos y los plazos.
• Gestión de la intervención: utilice un sistema de gestión en tiempo real para consultar la agenda de sus empleados y generar informes de intervención. De esta forma, mejora la coordinación y la eficiencia.
• Comunicación: optimice los intercambios dentro del equipo con herramientas de intercambio dedicadas y canales de noticias organizados por proyecto para fortalecer la colaboración.
• Centralización de documentos: Guarde todos los documentos importantes, desde los planes de producción hasta las actas de las reuniones y los documentos de prevención. Están agrupados en un solo lugar al que se puede acceder desde teléfonos móviles, tabletas y PC.

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